SOBREPESO Y AUTISMO
Varias personas con autismo suelen tener problemas con el
control del apetito, lo cual deriva en el aumento de peso progresivo y
finalmente la obesidad. Este problema en
muchos de los casos se debe a su alta ansiedad o a la auto selectividad de
tipos de alimentos que están dispuestos a aceptar. Algunos chicos son sensorialmente sensibles a
texturas en la comida y solo aceptan harinas refinadas, carnes, queso, yogurt y
otros alimentos altos en carbohidratos, grasa y azucar. articulo sobre obesidad y autismo
La obesidad infantil es un problema muy importante y no es exclusivo
del autismo. En el 2013, 42 millones de niños menores de 5 años tienen
sobrepeso o son obesos. Estados Unidos ocupa el primer lugar en el mundo de la
prevalencia de la obesidad. La obesidad infantil se ha más que duplicado en los
niños, y en adolescentes se ha cuadruplicado en los últimos 30 años. El porcentaje de niños de 6 a 11 años en los
EE.UU. quienes tienen obesidad aumentó del 7 % en 1980 a casi el 18 % en 2012.
Igualmente, el porcentaje de adolescentes de 12 a 19 años que tienen obesidad
aumentó del 5% a casi el 21 % durante el mismo período. En este país los
principales factores que contribuyen a la ganancia de peso son las extensas
redes de restaurantes de comida rápida y la falta de ejercicio.
El apetito es influenciado por lo que hasta ahora he
estudiado por dos factores:
La composición de la microflora intestinal
El metabolismo de la serotonina
En esta entrada al blog solo tocaré el tema de las bacterias
intestinales y más adelante hablaré sobre como el apetito es influenciado por
la serotonina cerebral.
La prevención y tratamiento de la obesidad se propone
empezar desde la infancia, cuando los factores ambientales ejercen un efecto a
largo plazo sobre el riesgo de la obesidad en la edad adulta.
Por lo tanto, identificar factores modificables pueden
ayudar a reducir este riesgo. Por lo tanto, la búsqueda de nuevos medios
no-tóxicos de la prevención y tratamiento de la obesidad es el urgente desafío
de la ciencia moderna.
Evidencias recientes sugieren que la microbiota intestinal
está implicada en el control del peso corporal, la homeostasis energética y la
inflamación y por lo tanto, desempeña un papel importante en la fisiopatología
de la obesidad.
Los Prebióticos y probióticos son de interés porque se ha
demostrado que alteran la composición de la microbiota intestinal y afecta la
ingesta de alimentos y el apetito, el peso y la composición corporal y las
funciones metabólicas a través de vías gastrointestinales y modulación de la
comunidad bacteriana intestinal. Como
dato curioso pero interesante; los
antojos por determinados alimentos dependerán de las especies prevalecientes de
bacterias intestinales. articulo sobre los antojos y la microbiota
La causa más frecuente que lleva a la obesidad es el
desarrollo de un imbalance entre consumo energético y el gasto energético. La
microbiota intestinal como un factor ambiental que influye en el metabolismo del
cuerpo entero no solo afecta el balance energético, sino también la inflamación
y la función de la barrera intestinal, integra las señales de ingesta
alimentaria central y periférica reguladoras y así aumenta el peso corporal.
Los probióticos tienen funciones fisiológicas que
contribuyen a la salud de la microbiota intestinal, puede afectar a la ingesta
de alimentos y el apetito, el peso y la composición corporal y las funciones
metabólicas a través de vías gastrointestinales y modulación de la comunidad
bacteriana intestinal.
FORMULAS DE PROBIOTICOS CON CEPAS CLINICAMENTE COMPROBADAS
EFECTIVAS PARA COMBATIR OBESIDAD
Tomar con lactase en caso de sensibilidad a la lactosa
PREBIOTICOS QUE SIRVEN COMO ALIMENTO A LAS BACTERIAS
PROBIOTICAS ADEMÁS DE FORTALECER LA INMUNIDAD
Comentarios
Publicar un comentario